La guapa cantante estadounidense festejó su cumpleaños número 42, al lado de algunos familiares y amigos. El doloroso momento que vive mancha de lágrimas su gran día.
A un par de semanas de haberse separado de su esposo Marc Anthony, Jennifer López celebró su cumpleaños número 42 en Miami.
La noche del sábado, Jlo y su familia, disfrutaron de una espléndida y sabrosa cena en el lujoso restaurante de Scott Conant, en el hotel Fontainebleau, con motivo de su cumpleaños.
“Jennifer se veía radiante con un vestido de noche púrpura y plata. Y cuando sacó su pastel de cumpleaños después de la comida, se puso a cantar. Estaba feliz. Todos la pasamos de maravilla durante horas”, dijo una fuente a la mencionada publicación.
Al día siguiente, JLo se fue de compras y visitó diversas boutiques en Bal Harbour Shops, justo al norte de South Beach. Compró varios conjuntos de bebé para sus hijos de 3 años, los gemelos, Emme y Max.
“Jennifer y sus familiares llegaron a las 21h00 y se fueron directamente a la bodega privada para una cena pre-cumpleaños. Fue un festejo privado y hermoso, la comida fue servida en una distinguida vajilla”, dijo la mencionada fuente a la revista People.
Según la fuente, Jennifer llevaba un largo vestido de colores vivos con dibujos geométricos, a quien se le pudo ver de muy buen humor.
Y como sorpresa para la festejada, el chef de la pastelería ‘Forge’ creó un soufflé de chocolate especial para la cantante. Sin embargo, López llegó al lugar poco después de comenzada la reunión, en donde sirvieron aperitivos de mantequilla de maní y jalea de langosta.
Al contrario de Jennifer, el cantante Marc Anthony ha decidido aislarse tras su divorcio.