La princesa Diana hubiera cumplido 50 años el pasado viernes, lo que quizás es la única certeza sobre el curso que podría haber tomado su vida si no hubiera muerto a los 36, con su novio en un accidente vehicular en París en 1997.
Pero mientras el mundo recuerda la vida y el legado de Diana, abundan las preguntas sobre lo que podría haber sido su vida. Andrew Morton, periodista británico que fue confidente de Diana y su colaborador en el libro sobre los problemas matrimoniales, cree que la princesa estaría viviendo en Estados Unidos. “Se habría conseguido un hombre con todos los juguetes, el avión privado, el yate y la casa en los Hamptons. Hubiera tenido una hija, siempre se aferró a esa ilusión”, dijo.