(EFE).- La Copa América será recibida en Argentina por una masa de aire polar que provocará un brusco descenso de la temperatura, en contraposición a lo que ocurría en la última edición del torneo, en Venezuela, por lo que el abrigo, la gorra y el echarpe serán impresicindibles para acudir a los estadios.
Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), la bajada de las marcas térmicas hará que los próximos días sean los más fríos del año en este país austral, situación que podría extenderse hasta mediados de la próxima semana.
Si hace cuatro años se disputaban partidos de la Copa América en Maracaibo, por ejemplo, a casi 40 grados centígrados, el inaugural entre Argentina-Bolivia del próximo viernes en La Plata podría jugarse con 36 grados menos.
Debido a las necesidades horarias de la televisión en América, varios partidos se disputarán entre las 00,30 y la 01.00 gmt, por lo que terminarán cerca de la medianoche argentina, hora en la que las temperaturas en varias regiones pasarán la línea de cero grados.
Entre ellos están los encuentros Argentina-Bolivia, Chile-México, Argentina-Colombia, Uruguay-Chile, Argentina-Costa Rica, Uruguay-México y Brasil-Ecuador en la primera fase.
Brasil, por caso, tiene varios jugadores en sus filas que participan en torneos europeos y están, por ese motivo, acostumbrados al frío, aunque la joven estrella Neymar, con inminente destino europeo, todavía es jugador de tiempos cálidos en el Santos.
Los brasileños, que llegaron hace diez días a Buenos Aires y están concentrados en las fueras de la capital del país, se abrigan como para ir a la Antártida y sus médicos les dan más dosis que nunca de vitaminas C para evitar los resfriados.
Una postal del frío reinante en el cono sur son los argentinos Lione Messi y Carlos Tevez entrenándose con gorras de lana, y a veces se los ve con ellas fuera de la concentración y, en el caso del delantero del Manchester City, en las calles y en programas de televisión.
Un intenso frío soportaron en 1987, cuando se disputó la primera edición de este competición en un sólo país después de años de peregrinaje entre varios, los jugadores que participan en la Copa América de Argentina, ganada por Uruguay.
El mismo frío que reinó en el Mundial de Argentina’78, en el que varios futbolistas se protegían con guantes, y cuya final entre Argentina y Holanda se disputó en el estadio ‘Monumental’ con cuatro grados en la segunda parte.
En Argentina, Chile y Uruguay no hay problemas con el frío, en Paraguay solamente bajan mucho las marcas térmicas durante una semana a mediados de año, tal como ocurrió en Luque cuando Martín Palermo malogró tres penaltis ante Colombia en la Copa América de 1999, la noche más fría de aquel año en ese país.
Desde Bolivia, donde a veces sacude fuertemente el frío durante las noches, y hacia arriba del continente, el clima cambia y dan ganas de beber una gaseosa o una cerveza en julio cerca de un estadio sin necesidad de tener abrigo a mano.
La comida de olla se impone en Argentina en estos tiempos. El «locro», que es un potaje con carne con hueso, tripa gorda, callos, patas de cerdo, patatas y legumbres; otros guisos que derivan de las cocinas española e italiana, y el glorioso cocido, al que los argentinos llaman puchero. Como para abrigarse por dentro. EFE