La Policía detuvo a 23 personas por la violencia religiosa en El Cairo, entre ellas al marido de la cristiana cuya supuesta retención en una iglesia por haberse convertido al islam encendió los choques que causaron 12 muertos.
La operación de detenciones fue llevada a cabo por el Cuerpo de Seguridad de Giza y las Fuerzas Armadas.