Desde que Hosni Mubarak fue derrocado el 11 de febrero por una ola de protestas populares, los egipcios han estado pidiendo la investigación contra el dictador, junto con los miembros de su gobierno.
Un comunicado de la Fiscalía General fue colocado en la red social Facebook, anunciando la detención de Mubarak. El documento señala que la investigación que está en curso es en torno a las acusaciones de corrupción, derroche del dinero público y el abuso de poder.
El ex mandatario, de 82 años, fue ingresado al hospital en Sharm el Sheij el martes, después de tener problemas cardíacos. Se cree que permanecerá en el centro médico durante los 15 días de su detención. La mayoría de los funcionarios del caído régimen también están siendo investigados bajo las acusaciones de corrupción.
Pese a la investigación, las relaciones entre el ejército, que tomó el control del país tras la caída de Mubarak y el movimiento de protesta popular se han resquebrajado. Los manifestantes se quejan que las investigaciones son lentas y que son superadas por la violación a los derechos humanos de los nuevos gobernantes.