El caos reina en la zona. Los vehículos ni siquiera pueden circular por las vías. El peligro para los moradores es inminente.
El sector de La Florida, al norte de Quito, está en estado de emergencia, debido a que las viviendas y las calles se hunden poco a poco. Estos inconvenientes se produjeron por el fuerte invierno que azotó a la capital durante los últimos meses.
Los moradores del lugar sufren a causa de las refacciones. Es el caso de Hilda Jaguaco, que tiene un local de expendio de frutas y verduras a un costado de los colectores. Cuenta con desesperación que ya no vende nada, porque la polvareda que levantan estas obras llega hasta sus productos, haciendo que estos se dañen y nadie quiera comprarlos. Asegura que a su avanzada edad, tendrá que abandonar el barrio y buscar un nuevo establecimiento para arrendarlo y así poder subsistir.
Por su parte, Carlos Nieto, habitante del sector desde hace varios años, dice que la circulación de los vehículos se ha vuelto más caótica y que la seguridad de los peatones está en riesgo, debido a la lentitud con la que avanzan los trabajos. Agrega que no entiende, por qué las autoridades esperan a que llegue el invierno para ponerse a trabajar.
Carmela Albán, vecina del lugar, menciona que es necesario que las adecuaciones queden sólidas para no volver a tener estos líos.
40 años tenían los colectores
El gerente de la Empresa de Agua Potable y Saneamiento (Epmaps), Othón Zevallos, indicó que estos daños se produjeron, porque los colectores de agua en la Florida, habían sido colocados hace 40 años. Además puntualizó, que el problema se presentó por la construcción de un nuevo colector, que no pudo ser construido el año pasado.