Representantes de un colegio de Sangolquí piden al cabildo del cantón que solucione los problemas de infraestructura. Alumnos del Colegio Agropecuario en Sangolquí, al suroriente de Quito, invadieron un terreno en San Francisco Bajo, perteneciente al municipio del cantón Rumiñahui. El hecho se produjo debido a que este plantel no cuenta con instalaciones propias desde su fundación hace 23 años. Cinco días llevan los estudiantes instalados en carpas junto con sus padres, quienes también reclaman por un sitio para sus hijos.
María Cajas, rectora de la entidad educativa, señala que se formó una comisión para hablar con el alcalde del cantón, Edwin Yánez, pero les indicaron que la propiedad se encontraba en litigio. En vista de esto los alumnos y profesores decidieron tomar posesión del terreno. “No nos vamos a mover hasta que el municipio nos dé estas tierras para levantar la infraestructura del colegio”, afirma indignado Félix Pillajo, representante de los padres de familia.
Según Darío Criollo, estudiante del plantel, las protestas que realiza junto con sus compañeros no son por perder clases, sino para poder tener una educación de calidad que siembre bases para el futuro. Por su parte, Marcelo Reinoso, presidente de la comunidad de Sangolquí, aclara que los vecinos del lugar están apoyando la invación de manera pacífica. 350 jóvenes estudían allí.