El gobierno portugués se encuentra al borde del colapso tras retirar los partidos de la oposición su respaldo a otra ronda de medidas de austeridad necesarias a fin de evitar su desmoronamiento financiero ante el peso de su abultada deuda soberana.
La caída del gobierno minoritario socialista es «inevitable», declaró líder del principal partido de la oposición portuguesa.
Portugal sería el último país de los 17 de la eurozona que necesite un rescate financiero, como fue el caso de Grecia e Irlanda el año pasado.
El año pasado, Grecia e Irlanda tuvieron que aceptar un rescate financiero multimillonario al perder los inversionistas la fe en las gestiones de sus gobiernos para pagar sus abrumadoras deudas y apuntalar sus economías.
Portugal es uno de los países más pequeños y débiles de la eurozona, pero su colapso financiero seguramente desataría una nueva crisis de nervios por la situación precaria que atraviesan otros países que emplean el euro, como España, Bélgica e Italia.