Dicen que la periodista Doménica Mena ya está cansada de hacer dieta.
Los antojos fueron el principal impedimento, para que la comunicadora desista de bajar de peso.
Doménica no soporta privarse de la delicia de un rico pollo frito. Aseguran que le encanta comer bien, por lo que ya no le importa estar «rellenita». No es bueno vivir de prejuicios.