Una imprenta que se dedicaba a la encuadernación de libros “ilegales” fue allanada por la Fiscalía de Pichincha.
En la imprenta ‘El colibrí y el Quinde’ ubicada entre las calles Javier Zambrano y Checa, se incautaron miles de libros ilegales de inglés. La licencia de estos textos pertenece a una editorial capitalina, la misma que se encarga de la distribución de los libros a todos los colegios del país.
El proceso legal fue encabezado por los abogados de la empresa afectada y por la fiscal de turno de la Unidad contra el crímen organizado, Tania Moreno, quien señaló que se dio cumplimiento a una orden emitida por el Juez Vigésimo Segundo de Garantías Penales en la cual se autorizó el allanamiento del local. De acuerdo con lo que indicó Moreno, este delito está típificado como “plagio” en la Ley de Propiedad Intelectual. Conforme lo indica dicha Ley, el proceso continuará con las investigaciones del caso. Es así, que los libros confiscados y las máquinas que se utilizaban para la adecuación de los mismos permanecerán en las bodegas de la Policía Fiscal. Carlos Velásquez, parte del consorcio de abogados de la firma editorial perjudicada, indicó que la denuncia fue establecida hace díez días.
Por su parte, el propietario del local incautado, Guillermo Mena, señaló que solo receptó un pedido de encuadernación realizado por Carlos Jiménez.
Tres años de cárcel por plagio
De acuerdo al artículo 324 de la Ley de Propiedad Intelectual, existe una pena de tres meses a tres años de prisión y una multa de 500 a 5 mil dólares por alterar una obra protegida. Así mismo dicho artículo recalca que quienes comercialicen textos sin las autorizaciones previas recibirán un serio castigo. Tres años de prisión por plagio.