Señor presidente de la república, querido Nicolas. Luego de nueve años, de haber servido a nuestro país con orgullo y felicidad, a la cabeza de los ministros, delegada por el presidente Jacques Chirac y despues delegada por usted mismo.
Es un honor y una resposabilidad.
Me esforcé por responder a eso velando, dentro de mis funciones como de mi comportamiento personal, respetar siempre las exigencias no solo de la legalidad sino también de la dignidad, la moralidad y la lealtad.
Hace de algunas semanas fui blanco de ataques políticos y mediáticos que fueron un vehículo para crear sospecha en contra la verdad. Por lo cual respondí a eso punto por punto a finla noble causa de mi función.
Luego de quince días, es mi familia la que ha sufrido constantes ataques por parte de los medios de comunicación inmiscuyendose en su vida privada con la finalidad de encontrar algo que pueda incirminarme.
Esta campaña no obstaculizará mi relación con mis partidarios internacionales ni mi capacidad de cumplir la misión que usted me ha confiado.
Yo tengo mucha consideración por los hombres y las mujeres del ministerio, asi como de las realciones internacionales y europeas que han servido a nuestro país con devoción y competencia. Teniendo en cuenta que sus acciones se hayan visto afectadas por esta clase de manipulaciones mediáticas.
Yo tengo una muy alta idea de la política de Francia como para aceptar que me usen de pretexto para una operación como la antes mesionada.
En consecuencia le solicito que acepte mi dimisión al cargo.
Le ruego a usted se fíe de creerme, Señor presidente de la república, con la seguridad de mi alta consideración. Con mi amistad fiel.
Michelle Alliot-Marie