Miles de personas se apostaron a la plaza central de Yemen, para reforzar las manifestaciones en contra del régimen de Alí Abdala. Un muerto y doce heridos fue el saldo de los choques entre opositores y partidarios del mandatario Alí Abdala Salé. Por otra parte, siete legisladores del partido de Salé renunciaron, debido a la situación y anunciaron que conformarán un bloque independiente. Con éstas suman nueve las renuncias al gobernante Partido del Congreso, desde el comienzo de las protestas a principios de mes. Salé, quien gobierna con el respaldo yanqui desde hace 32 años, ha dicho que no se presentará a reelección en el 2013, pero los manifestantes, inspirados por la caída de los gobiernos de Túnez y Egipto, exigen su renuncia inmediata. El gobierno de Salé ya estaba debilitado antes de las protestas, debido a los ataques de una rama de Al Qaeda, un movimiento separatista en el sur y el descontento de las tribus. En Saná, capital del país, miles de personas acampan en una plaza cerca de la universidad, quienes fueron atacados por partidarios del gobierno que llevaban palos y disparaban al aire, aunque no lograron desalojarlos. Los manifestantes reclaman además se tomen medidas para combatir la corrupción y la creciente pobreza.
Crisis empuja precio de crudo
La preocupación de los inversionistas por la crisis política en Libia y Medio Oriente, mantiene al alza el precio del petróleo. El precio del barril de crudo se disparó a los 110 dólares en las últimas horas. Los mercados están nerviosos por la posibilidad de que una escalada de la violencia en la región pueda afectar los suministros de petróleo. Antes de que estallaran las revueltas en Túnez y Egipto, el barril de petróleo se cotizaba por debajo de los 97 dólares. La especulación está afectando cada vez más al precio y a la inestabilidad de los mercados.