A una semana de haberse casado por el civil con Otto Padrón en Miami, ahora Angélica Vale le juró amor eterno a su amado en una boda religiosa qua pareció un cuento de hadas.
La comediante lució radiante y se veía como toda una princesa con el vestido de novia color marfil en el que lució su nueva figura. Su cabello estaba recogido y el vestido iba acompañado de un velo y un collar de brillantes.
La ceremonia tuvo lugar en el Colegio de las Vizcaínas en la Ciudad de México, lugar al que llegó acompañada por su madre, Angélica María, quien se veía emocionada y se encargó del ramo de rosas con el que caminó al altar la señora Padrón.
Tras la ceremonia religiosa, la actriz confesó que la recepción sería todo un reventón.