Un agente del Servicio de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos resultó muerto en un ataque en una carretera de México.
La escalada de violencia que azota México, alcanzó a la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE). Un agente fue asesinado y otro herido en un ataque con armas de fuego al vehículo en que viajaban. Fueron emboscados en la carretera 57 cerca de San Luis Potosí, con dirección a Monterrey, a unos 320 kilómetros de la ciudad de México.
Según la ICE, los dos agentes estaban asignados a labores relacionadas con narcotráfico y vigilancia de recursos. El director de Inmigración y Aduanas, John Morton identificó al agente muerto como Jaime Zapata, que trabajaba para la Unidad de Contrabando y Tráfico Humano. El agente herido no fue identificado.
La agencia de Inmigración ya trabaja con el Departamento de Estado de Estados Unidos y con las autoridades mexicanas, para investigar los motivos de este ataque contra los dos agentes especiales. La violencia relacionada con el narcotráfico es habitual en el norte de México, desde que en 2006 el presidente del país, Felipe Calderón, lanzara una campaña policial y militar para luchar contra los carteles de la droga. Este no es el primer ataque contra funcionarios norteamericanos en el país.