Cecilia, 30 años. Trabajaba en el área de internet en un medio de comunicación, donde adquirió la costumbre de entablar amistad con los cibernéticos. Fue así como empezó a relacionarse amorosamente con sus amigos de la web y jugó a la lotería en su vida sentimental.
Actualmente está casada con un portorriqueño, quien luego de tratarla durante un mes, le pidió vía mail, que sea su esposa y se la llevó a vivir al extranjero, donde son muy felices.
La arriesgada mujer confesó, que nunca pensó comprometerse, de esa manera, con alguien que era casi un extraño en su existencia, pero que aprendió a quererlo y respetarlo, como si la conociera de toda la vida.
Ella es una amiga muy cercana a mi, la conozco desde que eramos muy pequeñas. Soy feliz con la idea de verla llena de amor, pero sobre todo con la idea de que su felicidad se consolidará en los próximos meses, cuando ya sea mamá.
Mi Querida Cecilia:
Tu amiga es muy afortunada. Apóyala con fuerza a la distancia.
Tu Amiga Alexandra
