El Cairo, 29 ene (EFE).- Los ciudadanos de El Cairo han empezado a organizar patrullas urbanas para vigilar las calles y combatir los actos de pillaje que se están registrando en la capital en medio de las protestas contra el régimen de Hosni Mubarak.
Con la calle vacía de policías, una escena insólita en una capital donde hace sólo una semana era fácil encontrar dos en cada esquina, los cairotas temen que los comercios, los bancos e incluso sus casas sean objeto de actos vandálicos.
En el elegante barrio de Zamalek, situado en la isla de Gezira, donde se encuentran la mayoría de las embajadas, una veintena de mujeres recorren las calles armadas con estacas de madera y palos de escoba.
«Nos hemos dividido en secciones, los hombres protegen las entradas de Zamalek y las mujeres patrullamos las calles interiores», explicó a Efe Janan Batanuni.
Las mujeres van de puerta en puerta y hablan con los ‘bauabs’ (portero, en árabe), que suelen vivir en los bajos del edificio y que todo lo saben, para darles un número de teléfono al que deben llamar si detectan actos de vandalismo en la zona.
«Si encontramos a alguien lo detendremos, le pegaremos y luego informaremos al Ejército», comentó Batanuni, que añadió que el grupo está en contacto con los militares: «Nos han dicho que nos ayudarán».
Las Fuerzas Armadas se encargan ahora de controlar la ciudad, después de que anoche Mubarak pidiera su colaboración para mantener el orden, después de las sangrientas protestas que ayer asolaron El Cairo.
Mientras las mujeres hablan con los ‘bauabs’ y movilizan el barrio, los hombres se dirigen en grupos de diez hacia los puentes que comunican Zamalek con el resto de la ciudad portando palos de madera, barras de hierro e incluso uno de ellos una espada llena de herrumbre.
En Alejandría, la segunda ciudad más grande del país, se han formado comités de defensa civil similares a los de El Cairo con la idea de proteger los barrios del saqueo, informó la cadena de televisión qatarí, Al Yazira.
También en Suez, donde las protestas han sido más intensas y violentas que en El Cairo, la población ha pedido al Ejército que intervenga para poner fin a los actos de vandalismo.
Las Fuerzas Armadas han pedido a la ciudadanía que cumpla con el toque de queda y el Ministerio de Defensa ha asegurado que esta petición está justificada por las «acciones de sabotaje y violencia» y advertido que los infractores «se enfrentarán a sanciones judiciales». EFE