El vigente campeón, el suizo Roger Federer, y la número uno del tenis femenino, la danesa Caroline Woznkiacki, que derribó las opciones de la argentina Gisela Dulko, pusieron en órbita sus expectativas en el Abierto de Australia, igual que Juan Mónaco, que mantuvo a flote a la representación sudamericana en el primer Grand Slam.
Solo Juan Mónaco, vigésimo sexto favorito, prolongó su aventura en el Melbourne Park. No defraudó y tumbó al alemán Simon Greul, sustituto de última hora del francés Julien Benneteau, en tres sets ( 7-6 (5), 7-6 (4) y 6-2). Su adversario próximo será el holandés Robin Haase, verdugo del tercer argentino en liza, Carlos Berlocq, que terminó resignado a su suerte a pesar de su empeño (6-7 (1), 6-4, 6-4 y 7-6 (6).
Fue, sin embargo, el uruguayo Pablo Cuevas el que padeció la derrota más dolorosa. Dejó escapar un duelo interminable ante el portugués Frederico Gil, que tras cuatro horas y cuarenta minutos de partido se llevó el triunfo para avanzar a la segunda ronda del Abierto de Australia.
Gil, 91 del mundo, sorprendió al sudamericano, al que terminó por imponerse por 6-4, 6-7 (7), 4-6, 6-3 y 9-7. El luso no perdió nunca la cara al duelo frente un rival de mayor reputación en el circuito, situado en el lugar 41 del ránking y que se había impuesto en los dos duelos que previamente ambos habían dirimido. Ambos el pasado año, en el Masters 1000 de Indian Wells y en el torneo de Costa do Saouipe, en Brasil.
Gil será el adversario del francés Gael Monfils, protagonista de otra remontada épica. la duodécima raqueta del mundo estuvo contra las cuerdas. Pero enderezó el partido contra el holandés Thiemo De Bakker (6-7 (5), 2-6, 7-5, 6-2 y 6-1).
Mientras, Federer arrancó la defensa de su título y la carrera por recuperar el número uno del mundo con una lección de autoridad sobre el eslovaco Lukas Lasko, que semanas atrás, en Doha, tuvo contra las cuerdas al español Rafael Nadal. No hubo color y el suizo ganó con la contundencia que se le supone (6-1, 6-1 y 6-3).
En su intento por convertirse en el segundo pentacampeón en Australia, el helvético no encontró rival.
El estadounidense Andy Roddick también dejó de lado los sobresaltos. Tumbó al checo Jan Hajek por 6-1, 6-2 y 6-2. La agitación de la sesión la acaparó el ruso Nikolay Davydenko, otrora un habitual entre los diez mejores del circuito. Lejos de su mejor momento, demostró que su victoria semanas atrás ante Nadal en Doha fue por cuestiones atípicas. Por el mal estado del español.
El ruso fue sonrojado por el alemán Florian Mayer, que ganó por 6-3, 4-6, 7-6 (4) y 6-4.
El estadounidense Sam Querrey fue otro de los cabezas de serie despachados. Perdió contra el polaco Lukasz Kubot por 5-7, 6-2, 3-6, 6-1 y 8-6.
El torneo femenino devolvió la contundencia de Maria Sharapova, campeona en el 2008 y otra vez finalista, que arrolló a la tailandesa Tamarine Tanasugarn por 6-1 y 6-3.
Tampoco falló la belga Justine Henin, undécima favorita, finalista el pasado año y campeona en el 2004, aunque se dejó un set en el camino contra la india Sania Mirza (5-7, 6-3 y 6-1),
La número uno del mundo, la danesa Caroline Wozniacki mantiene sus empeños por lograr un gran triunfo que aderece su condición de reina del circuito. No tuvo problemas ante la argentina Gisela Dulko (6-3 y 6-4), incapaz de tirar de experiencia para hacer frente al talento de su rival.
Maria Sharapova ganó por primera vez en el Melbourne Park desde que asumió el título de 2008, superando el veterano tailandés Tamarine Tanasugarn por 6-1, 6-3 en el partido inaugural en el Rod Laver Arena.
La estadounidense Venus Williams también dejó su impronta. Tumbó a la italiana Sara Errani por 6-3 y 6-2. EFE