La Comuna es un barrio del norte de Quito, que no cuenta con un horario de recolección de basura. Los vecinos piden soluciones.
“Vivo hace más de veinte años en este barrio. Tengo tres hijos, y cuatro nietos. Todos vivimos en mi casa.Al ser una familia grande, la cantidad de desperdicios que a diario desechamos, se ha convertido en un problema. El recolector de basura pasa por nuestra calle dos veces por semana. En algunas ocasiones dejamos la basura en la esquina de mi casa, en otras lo almacenamos, pero sin duda es un problema al que no encontramos solución”, indicó Narcisa Durán, moradora de ese populoso barrio.
Es que las molestias en este sector de la capital saltan a la vista. En cada esquina existen montículos de basura, que son un foco de proliferación de mosquitos y de olores nauseabundos.
Pero lo que más preocupa es la falta de atención por parte del Cabildo, que en numerosas ocasiones ha prometido poner en vigencia medidas de solución ante la problemática, pero que hasta el día de hoy, no se han hecho realidad.
Los moradores piden a la empresa municipal encargada del problema, poner cartas en el asunto, y plantear soluciones.
El invierno genera problemas
El temporal lluvioso que vivimos en la ciudad, ha acrecentado los problemas de los moradores de ese sector capitalino.
La lluvia moja la basura por las tardes, y en la mañana el sol hace que los desperdicios emanen olores pestilentes. Las moscas y los animales abren las fundas, y el foco infeccioso enferma a los niños del sector.