Más de 400 trabajadores de la empresa se reunieron ayer en la AV. de Los Shirys para reclamar por su derecho al trabajo.
La protesta buscó presionar un cambio en la decisión de parar la producción de Pilsener y Club. La suspensión se da tras la decisión de la Jueza Novena de la Niñez y Adolescencia del Guayas, Manuela Calva, quien decretó que la empresa ya no podía vender ni distribuir estos productos.
El litigio se origina por el reclamo de ex trabajadores por el pago de 16 años de utilidades y que suman más de $90 millones.
Carlos Andretta, director de Relaciones Corporativas de la Cervecería Nacional manifestó que la empresa nunca fue notificada del proceso. Actualmente se ha pedido la revocatoria de las medidas para normalizar la producción.