Las autoridades de Indonesia elevaron ayer a 141 los muertos por la actividad del volcán Merapi, tras rescatar los cadáveres de cuatro miembros de los equipos de emergencia calcinados el pasado viernes, informa la prensa local.
El Merapi, situado en el centro de la isla de Java, lanzó ayer una columna de humo y ceniza de 4.000 metros de alto y continúa dando sustos a los habitantes.
Los expertos temen que la lava se deslice por el río Gendol, lo que la haría avanzar a una velocidad de hasta 90 kilómetros por hora.
El viernes pasado, una violenta erupción causó más de medio centenar de muertos y aumentó el número de evacuados a cerca de 200.000.
La mayor parte de las víctimas mortales desde que comenzó la actividad volcánica el 26 de octubre están siendo enterradas en fosas comunes.
Durante el fin de semana, muchas aerolíneas suspendieron los vuelos a la capital, Yakarta, situada a unos 500 kilómetros del volcán, aunque ya han sido reanudados.
El Merapi, que significa ‘montaña de fuego’, no ha variado la agenda del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, quien tiene previsto llegar hoy a Indonesia, donde vivió varios años durante su juventud.
Indonesia se asienta sobre el llamado ‘Anillo de Fuego’, un área de intensa actividad sísmica y volcánica, y tiene unos 400 volcanes, de los que 129 están activos.