Vie. Nov 22nd, 2024

Esta vía es altamente transitada por vehículos que ingresan a la provincia de Pichincha. Sus problemas preocupan día a día.

Falta de señalización, ausencia policial, irrespeto de carriles y desorganización se evidencian en Tambillo y Alóag. Retroexcavadoras, volquetas, materiales de construcción y decenas de obreros se divisan en diversos tramos de la Panamericana Sur, desde la curva de Santa Rosa hasta el Puente Jambelí, en el acceso sur de Quito.
En ese tramo, Panavial amplía la vía a seis y ocho carriles dependiendo del sector con el fin de mejorar la circulación de los aproximadamente 30 mil vehículos que pasan al día por la zona.
Además construye cuatro intercambiadores y un puente. El problema se agudiza en Alóag. Ahí las plataformas son estacionadas en los costados de la vía reduciendo los carriles de circulación.
Lo hacen incluso en la vía hacia Santo Domingo, obstaculizando el paso de los buses interprovinciales que también hacen paradas improvisadas en busca de pasajeros.
Las ventas son otro problema. Las casetas se ubican al borde de la vía.
Asimismo, la falta se señalización horizontal es un pretexto para que niños, jóvenes y adultos crucen de un extremo a otro toreando a los vehículos. En parte, esto ocurre porque no existe una división exacta entre la calzada y la vereda, ocasionando que peatones, vendedores y vehículos utilicen un mismo espacio para desplazarse.

Vía de alta peligrosidad

Ingenieros han evaluado durante años el registro de accidentabilidad de esta arteria provincial, y han concluido que al tratarse de una carretera de circulación rápida, el principal factor que ocasiona accidentes, es la irresponsabilidad humana.
Por lo que piden a la comunidad tomar precauciones durante los viajes del próximo feriado.