El comandante de la Policía, Patricio Franco, a nombre de la institución, elevó la disculpa pública, en una cadena nacional, donde reconoció las agresiones que provocaron muchos policías contra los ecuatorianos, mientras tenían secuestrado al Presidente.
El Comandante anunció que someterán a la justicia a los uniformados que provocaron el levantamiento y señaló que castigarán a los insurrectos.
Luego de pedir disculpas, el oficial mostró algunos testimonios de elementos policiales que lamentaban lo ocurrido, señalando que “son seres humanos”, que “cometen errores como todos”, pero anuncian que han decidido “sacudirse el polvo y seguir adelante y quieren recuperar la confianza ciudadana”.