El ministro de Seguridad Interna y Externa, Miguel Carvajal, manifestó ayer que lo ocurrido sobre el río San Miguel en territorio colombiano el pasado viernes, entre grupos irregulares y la policía de ese país, son hechos lamentables, que obligan a reforzar las políticas de seguridad en la frontera.
Al menos seis policías y dos rebeldes fallecieron en un ataque atribuido a la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), en la zona del río San Miguel, fronteriza con Ecuador.
Tras el bombardeo de Angostura en el año 2008, Ecuador aumentó la vigilancia en la frontera con Colombia y según Carvajal, es necesario intensificar la medida, para precautelar la seguridad del país.