Augusto Barrera, alcalde de Quito, señaló que para iniciar el proceso de financiamiento de las obras viales planificadas para la ciudad, es necesario arrancar con la recaudación de las deudas que mantiene la ciudadania hacia el Cabildo Metropolitano.
Uno de los principales problemas que se registran es el mal conteo del consumo de agua potable en sectores rurales, donde no se factura, los costos precisos, según el caudal abastecido a la zona.
En Quito, existen 420 mil conexiones domiciliaras legales de agua potable. De este total, el 34% no es facturado. Para frenar esta perdida se colocarán 360 macromedidores en los tanques de abastecimiento que medirán el total de metros cúbicos abastecidos. Llegó la hora de pagar a cabalidad los consumos.