EFE.- Los brasileños Sao Paulo e Internacional se juegan mañana (19h50) en una pugna vibrante no sólo una codiciada plaza en la final de la Copa Libertadores, sino un premio incluso mayor, un boleto directo para el Mundial de Clubes.
El ganador de esta semifinal representará a la Conmebol en el máximo torneo de clubes auspiciado por la FIFA, que se jugará en los Emiratos Árabes el próximo diciembre, puesto que el otro finalista, las Chivas, no tiene este derecho al participar en la Libertadores en calidad de invitado, al igual que todos los equipos mexicanos.
Con este aliciente adicional, ambos equipos prometen entregarse a una batalla abierta, tal vez hasta impetuosa y pasional, para adueñarse de esta llave, que hasta ahora está en manos del club de la ciudad de Porto Alegre, que ganó en la ida por 1-0.
Para darle la vuelta a la tortilla el técnico del Sao Paulo, Ricardo Gomes, ya ha anticipado que va a mostrar una cara diametralmente opuesta a la que ofreció en Porto Alegre, con su equipo lanzado al ataque sin tapujos ni miramientos.
Para ello, el ex bético Ricardo Oliveira, que se estrenó como goleador en la Liga este fin de semana, asumirá el rol de delantero centro junto a Dagoberto, mientras que Fernandão retrocederá unos metros para explotar al máximo su visión de juego y su movilidad, en combinación con el internacional Hernanes.
Los paulistas también se encomiendan a la presión de los graderíos llenos del Morumbí, aunque el Inter ya ha demostrado que no es un equipo que se deje intimidar por el miedo escénico, como ocurrió en la final de la Libertadores de 2006, cuando sustrajo una decisiva victoria por 1-2 en este mismo estadio.
En esta Libertadores, los paulistas no han encajado ni un solo gol en su feudo, mientras que los «gaúchos» todavía no han ganado fuera de casa, con sendas derrotas en sus visitas a los argentinos Banfield, en octavos, y Estudiantes, en cuartos, y tres empates en la fase de grupos.
Sin embargo, el Inter es un equipo renovado que camina con paso firme desde la llegada de su nuevo entrenador, Celso Roth, como se demostró cuando avasalló al Sao Paulo en Porto Alegre.
Resta la incógnita de qué capacidad tendrá el Inter de traducir su juego de toque en goles, algo que no sucedió la semana pasada, pero que mañana podría ser más fácil si el Sao Paulo juega más abierto como ha indicado su entrenador.
La calidad indudable de hombres como el argentino Andrés D’Alessandro y los brasileños Taison y Tinga, este último recién incorporado al equipo, son la mejor baza de los colorados para alcanzar su tercera final continental y su segunda participación en el Mundial de Clubes, que ganó en 2006.
El Sao Paulo, si consigue imponerse por dos goles de diferencia, pasaría a su séptima final de la Libertadores y volvería al Mundial después de su triunfo de 2005.
Alineaciones probables:
Sao Paulo: Rogério Ceni; Jean, Miranda, Alex Silva, Júnior César; Rodrigo Souto, Richarlyson, Hernanes, Fernandão; Dagoberto y Ricardo Oliveira. Entrenador: Ricardo Gomes.
Internacional: Renan; Nei, Bolívar, Indio, Kléber; Sandro, Pablo Guiñazú, Andrés D’Alessandro, Tinga, Taison; y Alecsandro. Entrenador: Celso Roth.
Árbitro: El paraguayo Carlos Amarilla, asistido por sus compatriotas Nicolás Yegros y Milcíades Saldívar.
EFE