Vie. Sep 20th, 2024

Artículo original:  La nanotecnología revoluciona la investigación del cáncer (CTDeportes.com)

¿Qué es una nanopartícula? Un documento escrito en el Reino Unido la describe como, aquella «que tiene una o más dimensiones en el orden de los 100 nm (nanometros) o menos.»  No es la definición universal pero es una de las más aceptables.  Algunas nanopartículas son conocidas por ser más grandes. Usted se podría preguntar cual es la importancia, pero la definición de una nanopartícula implica que se comporta de manera diferentes que sustancias idénticas pero más grandes.  Ahora podría ser interesante.  En la nanotecnología, los científicos construyen máquinas más pequeñas que las células que pueden atacar a la enfermedad a un nivel celular y genético.
¿Cómo trabajaría un robot nanométrico? Primero, son muy pequeños … realmente pequeños.  Un átomo mide 1 nm. La célula promedio es de 2 500 nm.  Si es de 100 nm o menos, podría ser unas mil veces más grande que un átomo. Solo piense en lo que esto implica para el mundo de la medicina.  Ahora imagínese a científicos construyendo una máquina de ese tamaño  ¿Qué podría hacer? Podría reparar el daño del DNA, invadir a los tumores y deshabilitarlos, y podría contarnos acerca del cuerpo humano como nadie habría imaginado.  Es una ciencia tan nueva, que muchos de nosotros no podemos imaginarla, y que la mayoría de gente cree que no existe. Basada en la misma tecnología de los chips de las computadoras, estas máquinas nanoscópicas han sido desarrolladas, probadas y usadas en institutos de investigaciones avanzadas como la Universidad de Berkely.
Cuando pensamos en la nanotecnología, pensamos en un programa futurista de ciencia ficción ubicado en el espacio en una distancia futura.  Las series de televisión y cine presentaron a la nanorobótica aplicada a la medicina y otras operaciones microscópicas, con reparos en lo delicado de la maquinaria y lo peligroso de los ambientes.  Muchos alarmistas pronosticaban propósitos siniestros que invadían el cerebro a nivel celular y controlaban la mente.
Pero en la actualidad se han realizado increíbles descubrimientos en la medicina.  El Dr. Sam Gambhir de la Universidad de Stanford desarrolló la nanopartícula de oro, que recubre a las células de cáncer para que sean iluminadas con la exposición de luz.  De esta manera los médicos pueden localizar tumores que no habían sido detectadas por semanas, meses y hasta años.
Esto solo es el principio de la historia.  Las partículas doradas usadas en el estudio mencionado arriba son vistas cuando son irradiadas con luz, lo suficiente caliente como para matar a las células cancerígenas.  El 8 de julio, investigadores de la UCLA mostraron nanopartículas que fueron capaces de distribuir drogas quimioterápicas y suprimir tumores en ratones.  Si, el potencial para una forma de quimioterapia que no daña tejido saludable.
«Son importantes dos propiedades de las nanopartícula,» dice Jie Lu de la UCLA. «Primera, la capacidad para acumularse en los tumores es excelente. Parece que evaden el mecanismo de vigilancia que normalmente remueve materiales foráneos del cuerpo.  Segunda, la mayoría de las nanopartículas que fueron inyectadas en los ratones fueron expulsadas a través de la orina y las heces en cuatro días.  Estos resultados son muy interesantes y podrían explicar la baja toxicidad observada en los experimentos de biocompatibilidad que realizamos.»  Los ratones estaban virtualmente libres de tumores al final del experimento.  Además, se reportó que la toxicidad de las nanopartículas en los ratones fue despreciable.  El objetivo de la investigación era determinar la probabilidad de desarrollo de un tratamiento anticancerígeno que solo apunte a las células de cáncer.
El próximo paso en el nanodesarrollo es la auto-replicación. Estas diminutas máquinas serán de poca utilidad a menos que puedan repetir sus funciones.

Por rtorres