El 30 de junio, ‘Quito Limpio’, finalizó por orden de la municipalidad capitalina, su labor como entidad encargada de recolectar la basura en el sur y centro de la urbe. En reemplazo a esta compañía, la Empresa Metropolitana de Aseo, asumió esa responsabilidad.
Para miles de quiteños, la deficiencia es notoria. La basura está amontonada en cada esquina. Las calles se han convertido en un basurero, ya nadie puede salir de su hogar sin tener que caminar entre desechos.
Las opiniones desde ese momento han sido variadas. Un grupo de personas hablan de un complot hacia la nueva empresa de limpieza. Mientras que otros opinan, que el caos se debe a la falta de experiencia que posee Emaseo en esta clase de emprendimiento.
Vecinos de ‘La Ecuatoriana’, llevan protestando desde hace 5 días. “Es inaudito este tipo de deficiencias. La empresa contratada es mucho más costosa que la entidad que laboraba anteriormente. Sólo queremos soluciones”, indicó Jaime Gualotuña, vecino de ese populoso sector.
CONTRATO ACTUAL
El monto del contrato firmado con Emaseo es de 20 millones de dólares, equivalentes a 14,4 dólares por cada tonelada recolectada, pero con el reajuste del precio mensual, la cifra asciende a 30 millones de dólares.
El Consorcio Quito Limpio cubria el 48% del total de residuos sólidos del Distrito Metropolitano y atendía a 930 mil personas aproximadamente, que viven en las zonas centro y sur de la capital. Estos son los sectores más afectados.
La basura y el malestar de los vecinos crecen día a día. La preocupación es creciente en áreas como Quitumbe, al ser una puerta de entrada del turista al capital.
Los empresarios preveen un descenso de visitas a la ‘Carita de Dios’. Urgen soluciones inmediatas.
