Tucson (EE.UU.), 25 sep (EFE).- El movimiento que ofrece refugio en EE.UU. a inmigrantes indocumentados que enfrentan ordenes de deportación se ha extendido hasta 24 iglesias, informaron hoy las congregaciones religiosas.
Líderes religiosos de diferentes denominaciones se unieron para invitar a los inmigrantes indocumentados a sus iglesias, ante la incapacidad del gobierno federal de otorgar un alivio migratorio para millones de indocumentados y reformar las leyes de Inmigración.
La pastora de la Iglesia Presbiteriana del Sur de Tucson, Alison Harrington, que ha dado refugio este año a dos inmigrantes en su templo, señaló que no permitirán que las familias sean separadas «por la incapacidad de los líderes del gobierno», según recogió hoy AZ Central.
Las acciones de estas congregaciones se asemejan al movimiento santuario de la década de 1980 que surgió en Tucson, en el que varias iglesias ayudaron a los inmigrantes procedentes de Centroamérica que cruzaron sin documentos a EE.UU. para solicitar un estatus de refugiados.
Además de las 24 iglesias que están listas para recibir inmigrantes, otras 52 apoyaran el movimiento, según dijeron líderes religiosos, quienes buscan con estas acciones pedir una acción inmediata del Gobierno en el tema migratorio.
Actualmente, según los directivos del movimiento, hay cuatro casos activos de inmigrantes en santuario y mañana se unirá al movimiento Francisco Pérez Córdova, quien pidió refugio en la Iglesia Luterana Agustiniana de Tucson.
En la web sanctuary2014.org, los organizadores explican en qué consiste el movimiento, además de dar a conocer las historias de inmigrantes que se encuentran refugiados en iglesias (tres en Arizona, uno en Illinois y otro en Oregón), quienes se hallan a la espera de que la Oficina de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, sigle en inglés) suspenda las ordenes de deportación contra ellos.
En la página también señala que las iglesias han ganado dos casos de santuario y son en total 12 ciudades en las que se está ofreciendo refugio en templos.
En una entrevista reciente, la activista y líder sindical Dolores Huerta cuestionó que la iglesia Católica no participe de este movimiento.
«Hasta ahora solo hemos visto a las iglesias protestantes dando santuario y queremos ver que la iglesia Católica se una a esta movilización», sostuvo. EFE