Quito, 4 sep (EFE).- El volcán Tungurahua, situado en el centro de los Andes de Ecuador, reanimó esta tarde su actividad, después de un corto lapso de silencio, con explosiones y flujos de piroclástos (rocas incandescentes) en los bordes de la cumbre.
El volcán «está saliendo de su periodo de silencio», en los que se notó una bajada de explosiones y en su actividad sísmica, «y ha producido en esta tarde unas «dos explosiones por hora», indicó a Efe la vulcanóloga Patricia Mothes, del Instituto Geofísico (IG) de la Escuela Politécnica Nacional.
Anotó que una cámara infrarroja que el IG tiene en las cercanías del volcán muestra al momento flujos piroclásticos «en la parte alta» de la montaña, que «no son grandes», pero que podrían aumentar si se incrementara la presión interna.
Según Mothes, que vigila al Tungurahua desde el observatorio Guadalupe, situado a unos 15 kilómetros al oeste del volcán, «hay mucho material que está guardado dentro» del edificio volcánico y que aún no ha podido salir.
Además, se ha formado un «tapón o sello en la parte superior» que dificulta la salida del material acumulado, indicó la científica al explicar que «podría» ocurrir una ruptura de dicho dique y permitir una liberación violenta de la presión interna.
No obstante, Mothes remarcó que eso «no se puede saber» con exactitud y precisó que las explosiones ocurridas en esta tarde han sido «discretas».
También señaló que el material acumulado en zonas internas superficiales de la montaña ha empezado a salir y bajar por los flancos en forma de flujos de rocas incandescentes, que se han estacionado en la parte alta del coloso.
«Ojalá avise» el volcán sobre la evolución de su actividad, como la hecho durante años, aunque han habido momentos en que se han producido explosiones violentas sin que se hayan detectado señales premonitorias, aseguró Mothes.
Situado unos 180 kilómetros al sureste de Quito, el volcán Tungurahua inició su proceso eruptivo en 1999 y desde entonces ha intercalado pulsos de gran actividad con lapsos de relativa calma.
De 5.016 metros de altura, este volcán forma parte del más de medio centenar con los que cuenta el país y junto al Reventador y el Sangay, es actualmente uno de los más activos en el territorio nacional. EFE