Según el filósofo Francis Métivier lo sucedido a Lily Allen durante el concierto en el V Festival Hylands Park el domingo pasado no fue un error repetido pero la confirmación de un estilo y una actitud.
El «error de vestuario» designa un accidente de vestimenta voluntario o involuntario (he ahí todo el interés de la ambigüedad) dejando aparecer una parte del cuerpo (por lo general un seno) que suele ocultarse ante el público.
Puede, según la inteligencia de su intención y la estética de su realización, tratarse de una verdadera actitud relacionada a un estilo. Por ejemplo: Lily Allen.
La cantante inglesa volvió a utilizar el vestuario utilizado durante el Bangerz Tours de Miley Cyrus. El traje plateado, ajustado y con cierre, que puede abrirse del cuello hasta el vientre. Con nada debajo. ¿Cometió el mismo error? Seguramente no. No se trata de un simple evento, mucho menos de un desafortunado evento, pero de una actitud y de un estilo.
Es verdad que Lily Allen no es la única estrella a la que le ha pasado este tipo de «accidentes». Pero no se trata de lo que la prensa dice «nada sirve de lección a Lily Allen» sino que es una confirmación de su dress code
(Fuente: Le Nouvel Observateur)