El presidente de Ecuador, Rafael Correa, alertó en una entrevista con el diario Folha de Sao Paulo publicada hoy de la puesta en marcha de una «restauración conservadora» en Latinoamérica que puede «poner fin al ciclo de gobiernos progresistas» en la región.
«La integración en América Latina, con visión independiente, soberana y digna, es una preocupación para Estados Unidos. Ya hay una restauración conservadora, de derecha, de las élites de siempre del continente, para parar esos procesos integracionistas y progresistas en el interior de nuestros países», añadió.
Según Correa, quien la semana pasada participó en Brasilia en un encuentro entre los BRICS y los líderes de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), la derecha ecuatoriana está en contacto con partidos conservadores de Venezuela y Estados Unidos con el fin de «combatir» a los gobiernos progresistas.
Existe una «inmensa responsabilidad sobre nuestros hombros» para evitar la «restauración» conservadora, dijo Correa.
En el caso de su propio país, reiteró que «como último recurso» frente a la derecha pudiera contemplar postular otra vez a la presidencia en 2017, una posibilidad que hasta ahora ha dicho que no está en sus planes.
Sobre la reunión celebrada esta semana entre las cinco grandes emergentes del mundo (Brasil, Rusia, China, India y Sudáfrica, que reciben el nombre de BRICS) y la Unasur, subrayó que «si queremos un mundo multipolar, tenemos que conformar y aproximar bloques».
En su opinión, «fue lo que ocurrió ahora, entre los BRICS y la Unasur. Para el país hegemónico de un mundo unipolar (Estados Unidos) debe ser preocupante (…) La reunión fue una idea brillante. Puede marcar el inicio de un orden mundial menos injusto», comentó.
Correa celebró la creación por parte de los BRICS «de una arquitectura financiera para no depender del Fondo Monetario Internacional (FMI) ni del Banco Mundial», a través de un banco de fomento propio y un fondo de reservas, mecanismos aprobados esta semana en la VI Cumbre del grupo.
«La Unasur debe hacer lo mismo, creando en el futuro la moneda única regional, para ser menos dependientes de los centros de poder. ¿Por qué un juez en los EE.UU. puede quebrar a Argentina? Porque por ellos pasan todos los pagos, que pueden bloquear», cuestionó.
De acuerdo con el mandatario, Latinoamérica no tiene «tiempo que perder. Y no vamos rápido».
Criticó el poder mediático y la «manipulación de información de ciertos medios de comunicación en manos de oligarquías«, al tiempo que defendió su regulación.
«Nuestro adversario en Ecuador no es la derecha, y sí sus medios de comunicación. Nos presentan como gobiernos autoritarios que persiguen periodistas patrióticos que sólo quieren decir la verdad. Y eso no es cierto», añadió.
Fuente: EFE