Jue. Nov 21st, 2024

 En vísperas del partido entre Brasil y Colombia del próximo viernes de los cuartos de final del Mundial 2014, un acto recordó hoy en Río de Janeiro el vigésimo aniversario de la muerte del defensa colombiano Andrés Escobar.

El acto fue organizado por la organización no gubernamental streetfootballworld con el propósito no sólo de recordar al futbolista sino también de promover el desarrollo social a través del fútbol.

El evento «20 años sin Andrés Escobar: la vida no termina aquí» tuvo por objetivo recordar el legado de este deportista y mostrar cómo su historia ha permitido crear un movimiento para transformar el fútbol en un instrumento de cambio de la sociedad, de acuerdo con los organizadores.

Andrés Escobar
Andrés Escobar



El 2 de julio de 1994 Andrés Escobar, capitán de la selección colombiana en aquel entonces, fue asesinado en la ciudad de Medellín tras una discusión sobre el autogol que marcó en el Mundial de Estados Unidos de ese mismo año y que supuso la segunda derrota de Colombia en la competición.

El fallecimiento del «Caballero del Fútbol», como era conocido, conmocionó al mundo, especialmente a los amantes del deporte.

Veinte años después, en el espacio Fútbol para la Igualdad de Río de Janeiro, fue destacado cómo el caso de Escobar ha servido de inspiración para convertir este deporte en una herramienta para proveer a los jóvenes de oportunidades, aseguran los responsables de streetfootballworld.

En el evento, que fue amenizado por la banda brasileña «Toque de Lata», se proyectó también el documental «Con el corazón de Andrés», de Andrés Weisner, como homenaje al futbolista.

La película, que se estrenaba hoy, persigue reflejar «cómo algunas personas convirtieron el dolor por el asesinato de Escobar en inspiración para que el fútbol fuera una herramienta de paz en distintos lugares», resalta el director.

Una de esas personas fue el alemán Jurgen Griesbeck, fundador de la ONG streetfootballworld, que en el momento de la tragedia se encontraba en Colombia e, impactado por el asesinato, decidió crear una organización cuyo objetivo principal fuera terminar, a través del fútbol, con estas situaciones de conflicto en Colombia, afirma.

«A los dos años (de la muerte de Escobar), después de estudiar el fenómeno de la violencia en Colombia, me senté con un grupo de colegas y amigos para lanzar un proyecto, ‘Fútbol por la paz’, que cambiaba un poco el reglamento del fútbol», comenta el alemán.

La organización potenciaba la inclusión de la mujer en el fútbol, «le concedía un papel protagónico en los equipos», y restaba importancia al árbitro, ya que «los participantes tenían que tomar las decisiones ellos mismos», explica.

Tras el éxito de este primer proyecto, Griesbeck creó en 2002 streetfootballworld, un organismo sin ánimo de lucro que engloba más de 100 organizaciones presentes en casi 80 países.

«Lo que tienen en común es que usan el fútbol como herramienta de transformación social», explicó.

La entidad pugna por combatir los principales problemas de cada uno de los lugares donde se encuentra mediante la práctica de este deporte, lucha contra estigmas como el racismo y las dificultades de inclusión social, enfermedades como el SIDA, las minas antipersonales o el desempleo.

«Lo interesante es que el fútbol atrae a los jóvenes, o a la gente con la que quieres trabajar, y los mantiene en un proceso para trabajar sobre el cambio de actitud», resalta Griesbeck al hablar de la eficiencia de este deporte como herramienta de transmisión de mensajes. 

 

Fuente: EFE