La policía brasileña desarticuló una red internacional que supuestamente vendía entradas de forma irregular para el Mundial de Brasil y detuvo a once personas.
Los agentes incautaron computadoras, teléfonos y cientos de entradas, algunas de las cuales habían sido entregadas originalmente a patrocinadores, organizaciones no gubernamentales e incluso a la selección nacional de Brasil.
La policía dijo que uno de los arrestados, Mohamadou Lamine Fofana, tenía acceso libre a áreas restringidas al ente regulador del fútbol, la FIFA.
Fuente: BBC Mundo