La policía brasileña dispersó hoy con gases lacrimógenos la primera manifestación contra el Mundial de fútbol Brasil 2014 registrada en Sao Paulo en el día en que comienza la competición, informaron fuentes oficiales.
Cerca de 150 hombres de la Tropa de Choque de la Policía Militarizada del estado de Sao Paulo dispersaron a un grupo de 50 manifestantes que intentaba marchar por la avenida Radial Este, la principal vía de acceso al Arena Corinthians, el estadio de Sao Paulo en que se disputará el partido inaugural del Mundial.
La policía detuvo a uno de los manifestantes que intentó frenar la marcha de los policías que, en fila, avanzaban con escudos hacia el local de la protesta.
Los manifestantes, convocados a las 10.00 hora local (13.00 GMT) en las redes sociales por movimientos que critican los elevados gastos del Gobierno en el Mundial, se concentraron inicialmente frente a la estación Carrao del metro, en la zona este de Sao Paulo, y pretendían marchar por la Radial Este.
Como los participantes en la protesta se negaron a obedecer las instrucciones de la policía para que no intentaran bloquear la importante vía, el comandante de la Tropa de Choque ordenó que los manifestantes fuesen dispersados tan sólo diez minutos después del inicio de la marcha.
Algunos de las personas que se dispersaron se dirigieron hacia la estación de Tatuape del metro, a pocas calles y en donde un grupo de empleados del metro de Sao Paulo está concentrado en una manifestación contra el despido de 42 trabajadores de la compañía.
Los empleados del metro, que llegaron a amenazar con una paralización en el día inaugural del Mundial y finalmente desistieron, han convocado diferentes protestas para exigir que la compañía readmita a los despedidos.
El gobierno regional de Sao Paulo determinó los despidos luego de que la justicia declarara ilegal, por «abusiva», la huelga de cinco días realizada por los empleados del metro hasta el lunes.
Las organizaciones que se oponen a la organización del Mundial y que critican los gastos públicos en la competición han convocado para hoy, en coincidencia con la ceremonia inaugural, a manifestaciones en diferentes ciudades.
Las autoridades han admitido su preocupación con las manifestaciones contra el Mundial pero esperan que sean de menor magnitud que las registradas el año pasado, cuando millones de brasileños salieron a las calles para exigir mejores servicios públicos en coincidencia con la Copa Confederaciones de la FIFA.
El Gobierno ha dicho que tolerará las manifestaciones desde que no sean violentas y desde que no amenacen la locomoción hacia los estadios en que se disputará el Mundial.
Fuente: EFE