Todas las miradas estaban puestas en Cristiano y en la duda de si jugaría de inicio. Los primeros compases del entrenamiento parecían indicar que todo estaba en orden. Pero después de los ejercicios de calentamiento comenzaron los rondos y surgió la noticia.
Cristiano volvió a sentir dolor en el tendón rotuliano y se retiró con cara de preocupación. Había completado sólo 20 minutos de la sesión. El crack no jugará de inicio esta noche, aunque podría estar en el banquillo por si hiciera falta para la segunda parte (situación que con el 3-0 parece difícil).
El portugués realizó con normalidad el primer rondo. Tras ese ejercicio tocaba un sprint. A la vuelta del mismo, para el siguiente rondo, su cara cambió. Se apoyó en las vallas publicitarias, mordiéndose las uñas, intentando digerir lo que le estaba pasando. Se sentó en el suelo. El preparador Giovanni Mauri se acercó. “Me duele”, le dijo el crack. Tras una breve charla, Cristiano enfiló el túnel de vestuarios, aún mordiéndose las uñas y con gesto serio.
Aseguran en el club que si el resultado fuera más ajustado podría forzar para jugar. Pero no lo hará con la final de Copa a la vuelta de la esquina (día 16). El récord de los 14 goles, que ya ha igualado, de Altafini (1962-63) en una misma edición de la Copa de Europa (también los hicieron Messi y Van Nistelrooy) ha quedado en un segundo plano, como superar los 49 goles de Di Stéfano en la competición.
Fuente: AS